viernes, 21 de septiembre de 2012

DIEZ TIGRES CELESTES EMPATARON A DOCE JUGADORES


 Por Manuel Araníbar Luna


Los celestes han recuperado el prestigio de ser un equipo que juega bien, que sale al ataque desde el “ya”, que tiene la delantera más goleadora del campeonato. Pero, además, este año han recuperado otra de sus virtudes al mando de su DT: no dar ningún partido por perdido.
A eso se le llama RAZA CELESTE, así con mayúsculas.
Anoche, seamos sinceros, en el primer periodo, el equipo celeste en su conjunto  no jugó bien. Se dejó amarrar en el medio campo ante un equipo rival que no  ofrecía peligro. Tan sólo un zurdazo de Ximenez que  chocó en el palo. Y eso fue todo el argumento ofensivo de la visita que salió a no perder, tapándole las salidas a Yotún y  Advíncula, poblando el medio campo para estorbar a Lobatón y Sheput quienes no llegaron al cien por ciento de rendimiento. Arriba, Rengifo, Ross y Ávila recibieron poca alimentación. Y pese a ello se llegó unas cuantas veces al área rival aunque de manera desordenada, a la chacra. Luego, al promediar los primeros 20’ la empezaron a jugar por alto, con lo cual el panorama, lejos de aclararse se oscurecía.
EL MEJOR JUGADOR DE LA VISITA
El segundo período fue bastante de lo mismo, con un añadido: la actuación del mejor jugador de la visita, un integrante crema que gravitó en el partido, destacando por todo lo que hizo por su camiseta, un verdadero hincha del cuadro visitante. Señoras y señores, honor al mérito, pónganse de pie y apláudanlo. 20 de nota para la estrella del equipo de Ate:
El señor Iván Chang
Este señor expulsó a Lucho Advíncula y con ello inventó una nueva infracción para el reglamento: tarjeta roja con letras cremas por soplarle la nuca a Calcaterra, ya que Usaín no tocó al jugador de la visita. Qué descaro.No cobró dos penales contra los celestes. Al Charapa le metieron un empujón escandaloso en el área rival. No se oye, padre. A Loba le metieron tremenda guadaña a vista y paciencia de todos los de rojo. Lógicamente, como hincha crema, le sacó la amarilla. Y peor aún, inventó otra infracción, cobró para afuera. A ver, díganme ¿qué sancionó? Una Changchada de Chang. Menos mal que Chang no pateó él mismo los tiros libres porque -por no haber jugado nunca ni canicas-  patea muy mal, que si no nos golean.
DIEZ TIGRES CONTRA DOCE
Y esta infamia trajo dos consecuencias:
Primero,  que los de Ate se lanzaran al ataque franco. En una de esas anotaron con disparo rasante. Pero ahí nomás terminaron sus arremetidas. Ese gol fue suficiente para ellos, se echaron para atrás, esperando contragolpear.
Y segundo, que esta injusticia en el marcador despertó a los tigres celestes que este año han salido a jugar con furia en el corazón ante las injusticias. Sporting Cristal, con la sangre en el ojo, resurgió  llevado de la mano por Cazulo, su caudillo del medio campo. Este gladiador de corazón valiente se puso el equipo al hombro y repartió overoles al resto del equipo, que se transformó en un grupo de diez tigres que se enfrentaban a doce jugadores (once cremas + Chang).
El elenco bajopontino, herido en su orgullo sacó a relucir su resucitada Sangre Celeste. Piki fue un tractor conteniendo, un tigre guapeando, un bandido robando pelotas, proyectándose, pisando toda la cancha sin demostrar cansancio alguno. El Burrito movilizándose por todo el medio campo, llevando la redonda, cambiando frente, repartiendo encomiendas. Ávila metiéndose en diagonal. Ayr y Chasqui proyectándose aunque desordenadamente. Yotún pegándose más a Ross quien sacó a relucir algunos chispazos. El chibolo Édinson luchándolas todas. Sporting Cristal copaba todo el campo. ¡Pero si parecían quince tigres contra doce rivales!
LA MARIÑEIRA DEL BURRITO.
Se jugaban ya los descuentos. La barra visitante cantaba haciendo cachita. Hasta que llegó el penal. Hablando en oro, no lo fue, sólo un pechazo al Irven Beybe que cayó de bruces y al oír el pitazo se levantó con cara de ‘yo no fui’, creyendo que le iban a sacar la amarilla por fingir. Pero no, era la pena máxima. La agarró el Burrito con la parsimonia de un diplomático. Se retiró unos pasos, miró la hora, midió, trotó como un chalán y, sobreparándose, aplicó la mariñeira poniendo quimba salsera en el amague, mezclando la batucada con el festejo. Llontop se lanzó en panzazo a la piscina equivocada mientras la rechoncha se metió por la derecha a dar besitos a las mallas. 1 a 1 definitivo y buenas noches.
MORALEJA: Si no estás jugando bien, saca a relucir tu Raza Celeste.

2 comentarios:

  1. La cagada... Grande Manuel! Nadie pudo describir mejor el partido!

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  2. Qué pasó, Aranibar y las califiaciones?
    ademas estás exagerando con la actuacion de los muchachos, todos sabemos que el medio campo ni la delantera funcionaron bien.
    de todas maneras buena cronica y me gustó la cachita con la que te burlas de esa basura crema llamada chang
    y mas naah

    fuerza cristal carajo por la ptmr

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