domingo, 25 de febrero de 2024

CHAPAMOS LA PUNTA CON TRIPLETE DEL KILLER

 Por Manuel Araníbar Luna.

Ya se dijo en esta esquina que los goles en la valla rival son medicina gratis, una catarsis, una purificación. Además, la depre del hincha herido se aleja cuando se crece en la tabla como la sombra cuando el sol declina (la frase es de Choquehuanca).


Maxcito abre la fábrica…

Por lo dicho líneas arriba, se tenía que ganar sí o sí. La orden era vacunar desde el pitazo de arranque. No obstante, ayer no se llegaba con claridad. La desesperación lo ciega a uno y el reloj corre más rápido que el apurado. Recién a la media hora Maxcito se encarga de abrir la fábrica tras un centro curvo desde la derecha. No la mete de palomita como todos lo imaginábamos. Lo hace con la espalda, más precisamente con un número sagrado en la dorsal, el 23. ¿Recuerdan quién era el dueño absoluto de la 23 desde el 2012 hasta el 2020?

Jorge Luis El Piki Cazulo.

Ya que no se le ha hecho aún el merecido reconocimiento por su brillante trayectoria, sus cinco copas y el ejemplo para la juventud rimense, este gol con la 23 es el primer homenaje al Piki por parte de uno de sus cazulitos. Merecido, aunque no suficiente aún.

Quitate tu pa’ ponerme yo…

Távara y Yoshi son los únicos lanzadores zurdos para tiros libres y córneres, no sabemos si escucharon el tema de la Fania, pero ayer Yoshi fue a patear el corner y en vez de lanzarla a la candela se la pasa sin roche al Chévere. Este no lo piensa mucho y mete el tavarazo curvo con bote traidor que Barbieri, para su desgracia, la suelta como si le quemara los guantes. Se aparece el Killer, terror de los arqueros que la mete de suave mitrazo para no despeinarse. 2 a huevo.

Empezando el segundo Paul McCartney, el cazador Cazonatti se escapa y lanza la pelota como globo de domingo de carnaval. ¿Y a quién le cae el dron con parapente? Al Killer que mete la mitra con toda la conchudez a la cocina sin que los Mannuccinos lo inviten. Tres a huevo y segundo del Killer.

Los locales se achoran, meten taba y atacan con el peligroso Matías Súccar, aunque sin puntería ni azúcar, pero Renato, arquero nato, salva varios  disparos a quemarropa de sicario en moto. Es que a raíz de las declaraciones de Paolo que allá en Trujiyork está mirando el partido, Renato, por siaca, no ha entrado calato. Tiene blindaje en los chimpunes, chaleco y guantes. Así que más pa’ allá, sicarios.

Locomía con el abanico…

Vuelven a juntarse los volantes. Yoshi se la juega a Távara que lanza el veneno en callejón. El defensa Míguez se come la miga y le regala el resto de pan con chicharrón a su paisano Caute. Este agradece y le hace un sombrero cajamarquino a Barbieri y la pelota entra dando saltos de canguro. El banderillero levanta el abanico de Locomía señalando offside. Es que le ha ofrecido la pelota a su hijo que está de cumple. Cartagena no está a ajeno a la situación y obedece al banderillero porque también se la quiere llevar.

Sin embargo, esta vez los borrachos del VAR han olvidado las chelas en la maletera. Tras varios minutos, Cartagena, malhumorado, señala el ombligo del campo. Qué mala pata, Cartagena, hoy la pelota es ajena. Se la lleva Caute por su triplete. Ambos jueces van a tener que comprarse una pelota en Trujiyork, que allá son más baratas. Cuatro a huevo. Esto está consumado y el Mannucci consumido.

Qué chévere, celestes, así los queremos ver el martes. Con goles, con fe, esperanza y calidad. Buenas noches.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario